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sábado, noviembre 07, 2009

'Los fantasmas de Scrooge', un cuento clásico con 'look' digital

Con Jim Carrey en seis papeles distintos y con la espectacularidad del 3D , el director Robert Zemeckis logra darle nueva vida al cuento eterno de Charles Dickens.

Si algo ha demostrado Jim Carrey a lo largo de su carrera es su capacidad para transformarse. Ya sea una caricatura humana como La máscara o un monstruo verde y peludo como El Grinch, el actor logra sorprender. Por eso no debería extrañar que a su encuentro con la prensa internacional, en un hotel de Beverly Hills, Carrey haya llegado con una poblada barba y varios kilos de más.

"Es un experimento para Halloween", bromeó cuando un periodista le preguntó al respecto. No lo dijo, pero la barba trata de ocultar su rostro ahora que ha engordado para la filmación de Los tres chiflados.

Pero con o sin barba, Carrey se las arregla para lucir tan jovial como siempre al hablar de su papel principal en A Christmas Carol (Un cuento de Navidad), la más reciente película del director Robert Zemeckis (Volver al futuro, Forrest Gump, ¿Quién engañó a Roger Rabbit?), que se estrena en Colombia el viernes 13 de noviembre, como Los fantasmas de Scrooge. Se trata de una cinta animada en la que Carrey presta no solo su voz, sino su físionomía.

"La primera vez que vi la película casi me da un ataque cardíaco -confiesa- porque ver a Scrooge es como ver a mi papá". Cuando los periodistas se muestran horrorizados por el comentario del actor al relacionar a su progenitor con el personaje encorvado, de nariz de gancho y barbilla prominente, Carrey aclara: "Bueno, él es la versión alegre".

Pero el avaro hombre de negocios que aborrece la Navidad es apenas una de las facetas de Carrey en esta cinta. El canadiense no solo le da vida a Scrooge en las distintas etapas de su vida -incluyendo la niñez-, sino que interpreta a los tres fantasmas encargados de llevarlo en un viaje al pasado, el presente y el futuro para darle la oportunidad de enmendar su camino.

"Siempre digo que no hay nada más peligroso en el mundo que los seres que no han sido amados. Gracias a los fantasmas, Scrooge se ve a sí mismo. Creo que si a todos nos dieran esa oportunidad, inevitablemente tendríamos una catarsis", dice.

La película se mantiene fiel a los diálogos del relato que escribió, hace 166 años, Charles Dickens, así como a sus cuestionamientos a los esquemas clasistas de la Inglaterra del siglo XIX. El director, que mantuvo en la trama escenas de pobreza, mendicidad, explotación y codicia desmedida, dice que esos elementos siguen vigentes en nuestros días.

"Dickens era muy vocal en denunciar la división de clases en ricos y pobres. En E.U. somos cada vez más diversos, pero tenemos ese mismo modelo, como subproducto del capitalismo. Algunas cosas nunca cambian", comentó Zemeckis.


Carrey va más allá y dice que Scrooge bien podría ser el primer villano corporativo de la historia. "Creo que las historias se cuentan cuando necesitan ser contadas. Y en esta época, en que nuestras instituciones se despedazan por la avaricia y la corrupción, esta historia se hace más relevante. Scrooge es la primera basura corporativa. Es impresionante".

Un salto al futuro

Los fantasmas de Scrooge sigue los pasos de las dos cintas más recientes de Zemeckis: El expreso polar y Beowulf, que se desarrollaron en una técnica llamada 'performance capture' (captura de interpretación) para generar personajes digitalizados basados en actores reales. Esos proyectos contaron con estrellas de la talla de Tom Hanks y Angelina Jolie pero, aunque fueron éxitos de taquilla, recibieron críticas de quienes no se hallaron del todo a gusto con la calidad de la animación.

El asunto parece cosa del pasado. Desde la impactante secuencia inicial de Los fantasmas de Scrooge, que recorre desde el aire las calles y callejones de la Londres victoriana, queda claro que Zemeckis y sus socios de Image Movers Digital han logrado dar un salto en materia tecnológica.

Aunque quedan esquinas por redondear, en particular en lo que se refiere a personajes secundarios, es apabullante el grado de realismo y de detalle que alcanza el personaje principal. Lo mismo puede decirse de los escenarios y de la iluminación, que hacen de la película -sobre todo en su versión 3D- una impactante experiencia visual que es, al mismo tiempo, una de las versiones más próximas al cuento original.

Zemeckis dice que, de cierta forma, la historia de Scrooge y los fantasmas navideños siempre influenció su obra. "Mucha gente no se da cuenta de que Un cuento de Navidad, probablemente, sea una de las primeras historias de viaje en el tiempo en la lengua inglesa. Creo que influenció la saga de Volver al futuro porque es un cuento que leí cuando tenía seis o siete años. Es uno de los relatos de viaje en el tiempo más bellos de toda la historia".


Fuente: vive.IN


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